El 17 de noviembre se celebra, conmemora y concientiza el Día Mundial del Bebé Prematuro.
Los nacimientos prematuros ocurren más frecuentemente de lo que creemos, por eso queríamos colaborar con información para aprender y poder empatizar y acompañar a las familias en este proceso.
En la Semana del Prematuro queremos destacar y celebrar los logros de los bebés al momento de pasar por una sala de Neonatología.
- No más respirador artificial ✨
Algunos de los niños y niñas prematuros necesitan ayuda para poder llevar oxígeno a sus pulmones, y para eso, los asisten con respirador, CPAP o bigotera.
Por eso es tan especial el momento en que los médicos anuncian que ya no es necesario y que cada vez falta menos para ir a casa.
- Primer abrazo con mamá y papá ✨
A veces la espera por ese primer contacto puede tomar días e incluso semanas. Y aunque puede no ser ideal o puede dar nervios, finalmente la piel, el olor, el calor y el amor se encuentran.
El contacto corporal es esencial para todos los bebés, es una manera de comunicarnos y de que nos sientan presentes.
- Ahora a dormir en cunita ✨
La mayoría de las veces, los bebés prematuros no pueden regular la temperatura de sus cuerpos ya que les implica mucha energía. Aquí es donde entra en acción la incubadora, para ayudarlos en ese proceso (a veces también se emplea el “método canguro”, que consta de mantenerlos permanentemente en contacto con el calor de un adulto).
Una vez que pueden regularizar su temperatura corporal por su cuenta, pueden empezar a dormir en una cunita normal. Lo que también significa pasar más tiempo conociéndose con mamá y papá.
Sabemos que la vivencia de cada persona es distinta y por eso quisimos darle voz a esta experiencia que transitan miles de familias por año.
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