Sean vuelos locales o internacionales, hay algunas cosas que deben considerarse a la hora de viajar con los más pequeñitos.
A continuación, una breve guía para tener en cuenta si de bebés, aeropuertos y aviones se trata.
Respecto a la edad
Se recomienda que los bebés tengan más de 7 días de vida para abordar un vuelo ya que existe la posibilidad de que no hayan recibido todas las vacunas y no hayan desarrollado aún la inmunidad suficiente, lo que los hace más propensos a contraer enfermedades infecciosas.
De todas formas y ante la duda, siempre es conveniente pedir la opinión del pediatra de cabecera.
Los preparativos
Comunicarse con la aerolínea para saber exactamente qué es lo que se puede subir al avión.
A las personas que viajan con bebés se les suele permitir llevar en cabina leche de fórmula o en polvo, jugos, papilla y, de ser necesario, también productos dietéticos, medicamentos, insulina, y otras medicinas en cantidad suficiente para el viaje.
También se puede solicitar a la aerolínea, con la mayor anticipación posible (aunque pueden ser mínimo 24 horas antes del vuelo), un moisés o cunita para el avión. La ventaja de pedirla de antemano es que también hay mayores probabilidades de que brinden a la familia asientos más espaciosos para acomodarse con el bebé.
Y por supuesto no pueden faltar los juguetes, peluches y mantitas. Volar en avión es toda una experiencia, por eso necesitamos estar preparados ante la eventualidad de que los bebés estén alertas y necesiten un poco de distracción y juegos.
Por eso lo mejor también es intentar volar en un horario que coincida con la rutina de sueño del bebé, para que pueda ir descansando la mayor parte del tiempo posible.
¿A qué edad empiezan a pagar pasaje?
Si bien las regulaciones varían según la aerolínea y el destino, por lo general, en vuelos domésticos, los bebés de hasta 2 años no pagan pasaje.
En vuelos internacionales, sí. El monto puede ser equivalente a la tasa de embarque más el 10% del pasaje o hasta el 75% del mismo.
¿Qué documentación debemos llevar?
En vuelos dentro de Argentina, solamente el DNI. Si llegara a viajar con sólo uno de sus padres (o ninguno), se requiere un permiso firmado ante un escribano o Juez de Paz.
En el caso de los vuelos internacionales, los padres deben presentar su libreta de casamiento o partida de nacimiento del bebé, pasaporte y visa al día (en caso de ser requerida en el destino). Y también es necesaria la autorización correspondiente si no llegara a viajar uno o ambos padres.
¡Ya estamos en el avión!
- La comodidad del cochecito. La mayoría de las aerolíneas permite a las familias despachar cochecitos y/o huevitos sin cargo. Esto es fundamental para pasear cómodamente por el aeropuerto hasta la hora del embarque. Una vez en la puerta del avión, se entrega para ser despachado y en el momento de la llegada, va a estar en la puerta esperándonos cuando estemos desembarcando.
- Recordá vestirlos en capas y con ropa cómoda. La temperatura del avión puede ser muy variante y vestirlos de esta forma te va a ayudar a que sea más práctico y rápido abrigarlos, desabrigarlos y cambiarles el pañal cuando llegue el momento.
- Para que no sufran dolor ni se les tapen los oídos en el despegue. Darles algo para que succionen. Puede ser la teta, una mamadera o chupete.
Si ya ingieren sólidos, pueden ser unas galletitas, una golosina o algo que les guste para masticar.
Esto además ayuda a que se distraigan y no sufran tanto los movimientos de ascenso y descenso.
- Es muy importante la hidratación. En la cabina de un avión el nivel de humedad es muy bajo, por lo que nuestro cuerpo pierde mucha agua a lo largo de un vuelo.
Por eso es necesario mantener a los más chiquitos hidratados periódicamente
(y nosotros también 😅).
¡Ahora sí! Con todos estos tips, lo único que queda es disfrutar del vuelo y de las vacaciones.
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